LA INCIVILIZADA INVASIÓN DE LA CIVILIZACIÓN

Cuando la sangre  de tus venas retornen al mar, Y el polvo de tus huesos vuelva al suelo, quizás recuerdes que esta tierra no te pertenece a ti, sino que tu perteneces a esta tierra.

Proverbio Indígena.

El estudio de la evolución del Derecho Ambiental, tiene que partir de antecedentes históricos pre-normativos de lo que hoy conocemos como; Derecho Ambiental. El estudio de la cosmovisión indígena y su visión espiritual  de la madre tierra, representa la alternativa  ideal,  de equilibrio espiritual, entre la existencia humana y el medio natural que le rodea, sea este, tierra, agua, aire, alimentos, animales o árboles y toda la gama de elementos vivos del planeta. 

 A pesar de la evolución normativa y teórica del derecho ambiental  a lo largo del siglo XX, en medio siglo XII, podemos afirmar en la mayor parte del mundo ocurren fenómenos ambientales (Cambio Climático,) causados por el ser humano, provocando un nivel alarmante de destrucción de la biodiversidad biológica dentro de todo su concepto de; la variedad de la vida en todas sus formas, nivel y combinaciones, la variabilidad de organismos vivos dentro y entre cualquier fuente, incluidos entre otras cosas, los ecosistemas terrestres, acuáticos y los complejos ecológicos  de los que forman parte,  la diversidad dentro de cada especie, entre las especies y los ecosistemas. Los, ríos, lagos, lagunas, diversidad  de vida en  el océano, peces, ballenas, delfines, humedales,  el aire, el ambiente visto cómo; el   sistema de elementos bióticos, abióticos, socioeconómicos culturales y estéticos que interactúan entre sí, con los individuos y con la comunidad en la que viven determinando su relación y sobrevivencia, además de todo los componentes de la atmosfera  que están sufriendo en su conjunto una acelerada destrucción masiva por parte de la epecie humana. 

Todo esto, ocasionado por la adopción de un modelo económico, político y social,  destructivo, codicioso y ambientalmente insostenible.

En lo que hoy conocemos como latino-américa, los pueblos indígenas que existían y habitaban  en la época pre-colombina fueron invadidos con sangre, fuego y religión con el objetivo de imponer un sistema económico, político, social y religioso importado del Reino de España y la Europa colonial. El modelo  impuesto por los invasores  europeos, promovía la explotación indiscriminada de los recursos de la tierra, teniendo como principal objetivo la explotación sistematizada de los minerales del “ nuevo mundo”, el oro  fue su principal objetivo extractivista, en este contexto histórico, lo que hoy se conoce como Nicaragua, no fue la excepción.

La cosmovisión de los pueblos indígenas, su derecho, sus instituciones organizacionales y  las costumbres aún viven en nuestra realidad jurídica y muy en especial, en nuestro derecho Ambiental. Dentro de las especificidades de la cultura indígena, la más conocida es sin duda la relación que el indígena mantiene con su tierra ancestral. ¹En la Cosmovisión maya el Sol es el padre, la luna es la abuela y la tierra es la madre. En el sur del continente el pueblo mapuche se  identifica como gente (che) de la tierra (Mapu).Para la cultura indígena la tierra ancestral tiene un valor más espiritual que comercial además de ser la fuente de la vida, por eso mismo la tierra es de propiedad comunitaria pertenece al grupo y no a un individuo, y no puede ser considerada como una mercancía ni mucho menos como un bien susceptible de apropiación privada o enajenación a terceros en las condiciones que establece  el sistema napoleónico.

² Como en todo el continente, el territorio de Nicaragua fue primeramente poblado y traficado por tribus de amerindios (mongoloides). Las Huellas de Acahualinca revelan la presencia humana hace 6 mil años. Sin embargo, la información científica más precisa que se ha logrado obtener se remonta a hace poco más de mil años.

Los estudios revelan que para el siglo X Nicaragua estaba ampliamente poblada por tribus que eran ramificaciones de los Chibchas (un amplio y dividido pueblo sudamericano de raza atlantotropical). En el Centro y pacífico se encontraban los Matagalpas, pero estos fueron desplazados por invasores que venían del norte, aunque pudieron conservar sus territorios en las montañas del norte y centro del país (las actuales Segovias de Nicaragua).

Estos invasores fueron los Chorotegas, que tenían influencias Mayas y eran racialmente Mesoamericanos. Provenían aparentemente del sur de México y llegaron al pacifico nicaragüense alrededor del año 900 d.C. Su cultura era diferente y se extendieron a lo largo de la franja del Océano Pacífico, en donde permanecieron imperantes en pequeños pueblos por 300 años.

Alrededor del año 1200 d.C. llegó una última invasión. Eran también mesoamericanos de origen Nahua, emparentados con los Aztecas. Su migración hacia el sur se debió a la destrucción de su imperio, el de Tula, por los norteños Chichimecas. Llegaron a Nicaragua y expulsaron a los Chorotegas del Istmo de Rivas, en dónde se instalaron y se identificaron como los “Nicaraos”. También fundaron pueblos en los departamentos de Carazo y Masaya.

Algún tiempo después llegaron los Subtiabas o Maribios, también nahuas, que ocuparon un pequeño territorio en el centro de la región Pacífica, enclavado entre los territorios Chorotegas y Nicaraos.

En el caribe permanecieron en las impenetrables selvas los Sumos o Mayangnas, los Rama y los Miskitos (todos de origen chibchas). Estas eran tribus nómadas, en su mayoría, pero se fueron asentando en comunidades en los bordes de ríos y el mar.

La visión europocéntrica de la historia latinoamericana es una de las causales directas de los problemas cosmológicos de la sociedad latinoamericana. La primera interrogante está en la teoría de la “civilización occidental”, ¿de qué se trata la civilización de la que hablan?, ¿Qué es lo que hacen?, si analizamos la historia de esta “civilización”,  encontraremos una lista de los crímenes más grandes cometidos en contra de la especie humana, la alienación, la destrucción del planeta, las guerras fratricidas promovidas, impulsas , diseñadas y dirigidas por estas grandes “civilizaciones”, genocidio, hambre, desigualdad, destrucción, al final del día me gustaría entender un poco de la teoría de la mal llamada “civilización” y del famoso ‘desarrollo”

Mi objetivo no es ofender a nadie, simplemente quiero ser realista ante los fanáticos de la superioridad de la “civilización occidental”, esos que escriben la historia y aquellos que la disimulan.

No culpo a nadie por los males de nuestra sociedad, aborrezco el discurso de pobrecitos y explotados, detesto los peyorativos del tercer mundo o el primer mundo, HAY UN SOLO MUNDO!.

Ya basta del discurso de pobreza, del discurso de víctima, necesitamos el discurso de la pro actividad, de las soluciones, de la eficiencia, yo creo en Nicaragua, tenemos un gran Nación,  necesitamos   cambiar nuestra manera de pensar, Nicaragua no es un país pobre, nunca lo fue y nunca lo será, simplemente está afectado por la mentalidad de pobreza y por un modelo destructivo y nocivo para la humanidad.

Estoy seguro que Nicaragua puede encontrar un modelo de desarrollo adecuado a nuestra cultura e idiosincrasia, no necesitamos 20 MCdonals en cada ciudad o grandes edificios o las opulencias del “desarrollo”, lo que necesitamos urgentemente es una educación de calidad y la inversión del 90% de los recursos del Estado en el desarrollo y capacitación de nuestro capital humano que es al final del día la representación directa de lo hoy  conocemos como Nicaragua.

Necesitamos urgentemente volver a la raíz de nuestra civilización y entender que nuestra conexión espiritual con la tierra es mucho más importante que un indicador macroeconómico, que el dinero es papel, y que el hombre pertenece a la tierra, no la tierra al hombre, cuando entendamos esto, no necesitaremos seguir “reconociendo” los derechos que tiene la tierra, el cosmos, el sol, la luna, el agua, los bosque, los animales y todo el ambiente, el cual existe,  independientemente a la conciencia humana.

(¹Memoria, Seminario Internacional Sobre Administración de Justicia y Pueblos Indígenas, 1999, pág.)

(2 http://vianica.com/sp/go/specials/6-razas_de_nicaragua.html_)